domingo, 13 de diciembre de 2015

AGRESIVIDAD EN ADULTOS MAYORES

Los trastornos conductuales en el anciano, asociados a la demencia, como la agitación , son una causa importante de sobrecarga en la persona cuidadora.

La agitación se puede manifestar de forma no agresiva, verbal o física pero también con agresividad física (patadas, mordeduras,empujones,golpes,etc). Puedes ser debida a varias etiologías y se ha de hacer un diagnóstico diferencial para saber si es debida a factores ambientales,enfermedades médicas o trastornos psicóticos.

Algunas veces surge debida a frustación, ansiedad, enfado. El programar actividades durante el día o tratamientos psicosociales pueden beneficiar en estos casos.

El tratamiento de elección en personas con demencia es el no farmacológico y farmacológico cuando la agitación es secundaria a psicopatología.


 1/ FASE DE EXPLOSIÓN DE LA AGRESIVIDAD
  •  Mantener  calma.
  •  Mostrar autocontrol. 
  •  Evitar reacciones alarmistas.
  •  Mostrar confianza.
  •  Dejar que nos exprese el motivo de su  enfando o sentimientos.
  •  Escucha activa.
  •  Mirarlo a la cara.
  •  No sujetarlo inesperadamente, ni hacer  movimientos bruscos. 
  •  No acercarnos por detrás y menos con  movimientos rápidos.
  •  No amenazarlo, ni "tomarle el pelo".
  •  Estar a su misma altura, los dos de pie, o  sentados.
  •  No usar contenciones físicas. 
  •  Cuidar el tono de voz y nuestro lenguaje  corporal.
  •  Informarlo de lo que haremos, con frases cortas y sencillas.
  •  Hablarle despacio y con claridad.
  •  Evitar cruzar los brazos.

2/   FASE DE NORMALIZACIÓN

Si no se produce una disminución de la agitación controlando los factores ambientales, es necesario tomar medidas para evitar riesgos de autolesión o agresión en personas presentes,

Si no podemos controlar la situación se ha de pedir ayuda a una sola persona. Es necesario sujetarlo con suavidad por los brazos,explicándole que lo soltaremos cuando se calme.

Poner unos límites, cuando sea necesario debe ser siempre terapeútico.


ELECCIÓN DEL TRATAMIENTO

Tanto el tratamiento farmacológico, como el no farmacológico pueden ser útiles. La utilización de uno u otro dependerá del curso evolutivo y las posibilidades de elección en cada caso concreto.
La elección de uno u otro se hará e base a una reflexión y análisis de todos los elementos.
Se deben adaptar a cada paciente, evitando en la medida de lo posible agitación- sedación farmacológica.


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